viernes, 26 de julio de 2013

EGIPTO-OBAMA

EN EL DÍA DE HOY EL RÉGIMEN GOLPISTA DE EGIPTO HA ENJUICIADO AL PRESIDENTE CONSTITUCIONAL MURSI BAJO EL CARGO DE HABER BRINDADO AYUDA A HAMAS QUE BIEN SABEMOS ES UNA DE LAS ORGANIZACIONES MÁS COMBATIVAS QUE EXISTEN EN EL TERRITORIO PALESTINO. CURIOSAMENTE TANTO OBAMA COMO SECTORES DE IZQUIERDA Y ALTERNATIVOS CONCUERDAN EN NO CALIFICAR LA CAÍDA DE MURSI COMO UN GOLPE DE ESTADO EN TANTO QUE EN EL CASO DE EEUU SE TRATA DE NO POR ELLO SUSPENDER EL ENVÍO DE AYUDA MILITAR PARA MANTENER SEGURAS LAS FRONTERAS CON ISRAEL. TAL COMO VEMOS MUCHOS APARENTES ENEMIGOS UNA VEZ MÁS CONCUERDAN EN LO ESENCIAL


La administración Obama no utilizará la palabra "golpe" para Egipto


The Associated Press. Un partidario del presidente islamista Mohamed Morsi de Egipto en imágenes frontales del presidente Mohammed Morsi en Nasr City, donde los manifestantes han instalado su campamento y mantener su concentración diaria, en El Cairo, Egipto, Jueves 25 de julio de 2013. El líder de la Hermandad Musulmana, el jueves hizo un ataque inusualmente duro con el jefe militar de Egipto, diciendo que su derrocamiento del presidente Mohammed Morsi fue un crimen peor que incluso destruir la Kaaba, el lugar más sagrado del Islam. (AP Photo / Hassan Ammar)
Por BRADLEY KLAPPER / Associated Press / 25 de julio 2013

WASHINGTON (AP) - El gobierno de Obama dijo a los legisladores el jueves que no declarará al derrocamiento del gobierno de Egipto como un golpe de Estado, lo que permite a Estados Unidos a continuar proporcionando $ 1.5 billones en ayuda militar y económica anual a más poblado del mundo árabe país.

De esta manera Washington pudo resolver el retraso en la entrega de cuatro F-16 aviones de combate a Egipto. Fue la primera acción de EE.UU. desde que el ejército derrocó Mohammed Morsi como presidente, lo encarceló junato a otros miembros de la Hermandad Musulmana y suspendió la constitución a principios de este mes.

El gobierno se ha visto obligado a contorsiones difíciles de justificar en no declarar un golpe de Estado, que pediría la suspensión automática de los programas de asistencia estadounidenses bajo la ley EE.UU.. Washington teme que la detención esta financiación podría poner en peligro a los programas que ayudan a asegurar la frontera de Israel y la lucha contra el contrabando de armas hacia la Franja de Gaza controlada por Hamas, entre otras cosas que se ven como críticos para la seguridad nacional de EE.UU..

Los legisladores dijeron que el gobierno no ha caracterizado el trastorno como un golpe de Estado, y no pueden hacerlo, ya que sigue decidido a seguir prestando Egipto con la ayuda. Esa evaluación apoyada funcionarios del gobierno que dijeron que no usaban esa palabra para describir el cambio de poder y no piensan en el futuro, ya que Egipto se mueve para restaurar el gobierno civil y tiene nuevas elecciones democráticas.
El senador Bob Corker de Tennessee, el republicano del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, dijo que los legisladores estaban mirando  la ley golpe EE.UU. en forma más flexible para los casos ambiguos similar en el futuro mediante la adición de exenciones o condiciones para ayudar a la administración. Pero en el caso de Egipto, Corker admitió:'' Nunca se puede determinar lo que pasó''.
Su homólogo en el Comité de Servicios Armados del Senado, el senador Jim Inhofe, republicano de Oklahoma., También apoyó la idea de una renuncia para dar a la administración la posibilidad de llamar a un golpe de Estado lo que es sin enfrentarse a recortes automáticos. Inhofe dijo que ha redactado esta legislación ya.
Muchos de ambos partidos en el Congreso simpatizan con la opinión de la administración y la necesidad de apoyar a un militar que ha salvaguardado la paz de Egipto con Israel durante tres décadas. Sin embargo, algunos a través del espectro político están de acuerdo.Republicanos desde el libertario senador Rand Paul de Kentucky al de línea dura senador John McCain, de Arizona, y los demócratas como el senador Carl Levin de Michigan, han exigido hacer cumplir la ley golpe.
La ley establece, sin embargo, que es el presidente Barack Obama y la decisión de su gobierno sobre la forma de caracterizar 03 de julio del derrocamiento de Morsi.
La Casa Blanca y el Departamento de Estado señalaron poco después de las grandes protestas contra Morsi que precedieron a la acción de los militares y dijeron que el gobierno islamista de Morsi, y democráticamente elegido, estaba tomando Egipto por un camino cada vez más antidemocrático.
Desde entonces, el presidente y su equipo de seguridad nacional han tratado de equilibrar el apoyo al proyecto de retorno de los militares al orden constitucional y las elecciones democráticas junto con la preocupación por la represión de los aliados clave Morsi. El retraso de los aviones de combate, programado para la entrega de este mes, fue la primera acción directa de los EE.UU. llevó desde la agitación.
Sin embargo, el Pentágono dijo esta semana que los EE.UU. se estaba desarrollando según lo planificado con los ejercicios militares conjuntos de este año. Las maniobras bienales fueron canceladas en 2011 después de la revolución que derrocó al presidente Hosni Mubarak. Durante tres décadas de Mubarak en el poder, Egipto fue el aliado principal de Estados Unidos en el mundo árabe y en el centro de sus esfuerzos para luchar contra el terrorismo islámico, hacer retroceder la influencia iraní en el Medio Oriente y la promoción de la paz entre Israel y sus vecinos musulmanes.

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